El desastre dejó una niña fallecida y más de 40 viviendas afectadas. La Fiscalía determinó que el alcalde de La Paz siga el proceso sin detención.
La tragedia de Bajo Llojeta, ocurrida el 23 de noviembre, continúa generando repercusiones. Este lunes, la Fiscalía determinó que Iván Arias, alcalde de La Paz, se defienda en libertad mientras avanza la investigación sobre la mazamorra que cobró la vida de una niña de cinco años y causó severos daños materiales.
Amparo Morales, directora de Asuntos Jurídicos de la Alcaldía, aseguró que Arias seguirá colaborando con transparencia en el proceso judicial y aportará la información necesaria para esclarecer el caso. «El alcalde no tiene nada que ocultar y confía en que la verdad saldrá a la luz», afirmó.
Arias compareció ante el Ministerio Público por segunda vez este lunes. Durante su declaración, que duró más de cinco horas, fue asistido con oxígeno debido a problemas de salud recientes. A su salida, fue recibido por autoridades municipales y organizaciones sociales que aguardaban el fallo.
Mientras tanto, el alcalde de Achocalla, Manuel Condori, también investigado por el mismo caso, fue enviado con detención preventiva al penal de Patacamaya. La llegada al país del empresario vinculado a la inmobiliaria Kantutani, considerado otro presunto responsable, aún está pendiente.




